La inyección de puntos gatillo se utiliza para tratar el dolor típicamente muscular, generalmente localizado en puntos concretos, llamados puntos gatillo. Se siente como un nudo o una banda apretada, tensa del músculo, y es sensible a la presión profunda o palpación, estos puntos pueden producir un dolor irradiado a otras zonas al presionarlos, de ahí su nombre y pueden aparecer en cualquier área del cuerpo, pero más comúnmente se localizan en el cuello, trapecios, los hombros, dorsal y en la zona lumbar baja.
La presencia de puntos gatillo puede ser la causa principal de dolor muscular o también pueden aparecer como consecuencia de traumatismos, problemas degenerativos de columna, en fibromialgia, después de cirugía y muchas otras condiciones.
Procedimiento
La inyección de los puntos gatillo es un simple procedimiento realizado en la consulta. El médico examina al paciente por palpación, la zona dolorosa para identificar los puntos de dolorosos. Después de limpiar la piel, se utiliza una pequeña aguja (25G) para inyectar el punto doloroso con una pequeña cantidad de anestésico local. No se utilizar corticoides. La inyección puede causar una contracción o leve molestia que puede durar unos pocos minutos. Normalmente se requiere repetir el procedimiento varias veces (3-4) repartido en 2 semanas.